El avance aleman sobre el frente en Ixkiul y dos días despúes sobre Riga, hacen mas denso aun el clima político
El 1 de septiembre, los alemanes rompieron el frente ruso en Ixkiul, y el 3 de septiembre ocuparon Riga.
Ante los pésimos resultados, la prensa intensifica la campaña contra los "obreros que no trabajan" y los "soldados que no combaten". La revolución parece ser la responsable de todos los males: dicen que se cedió Riga y que hay disposición a ceder Petrogrado.
Sin embargo, la campaña desatada contra el ejército, tan furiosa como la de hace mes y medio, no parece ser tan efectiva.
En ese entonces los soldados se habían negado, atacar: no querían remover el frente, sacar a los alemanes de su pasividad, reanudar el combate. En esta oportunidad, la iniciativa del ataque había partido del enemigo, y la conducta de los soldados fue muy distinta.
Generales y funcionarios reconocen la valentía y "bravura excepcional" de los tiradores letones y del 10° ejército que a pesar de su completo agotamiento y gran cantidad de pérdidas "realizaron honradamente y sin rechistar la tarea que les ha sido encomendada"